martes, 10 de mayo de 2011

Entrevista a Jeffrey Crespo (2da Parte)

¿Cuál es la finalidad de la vida?

Cuado me haces esa pregunta estás comparando la vida y la igualas a un objeto ajeno y externo a ti, como si se tratara de algún aparato mecánico que se utiliza para hacer algo pero no sabemos qué.

La vida no tiene fin, la vida es. Cuando te das cuenta de que no estás vivo, de que no tienes una vida, sino que eres vida, vives!.

No es un artefacto sin instrucciones que entre todos tenemos que rebotar ideas y descifrar para qué sirve. A ver si me explico, cuando eras un crío y estabas en tu etapa de bebé no permaneciste inmovil toda tu infancia preguntándote para que son las piernas, sino que apenas desarrollaste la fuerza necesaria te atreviste y las usaste, y así entre tropezones, caídas y triunfos anduviste, y hoy caminas, corres, te agachas y brincas sin pensar ni cuestionarte la finalidad de las piernas.

Sal de tu cabeza, sumérgete en tu corazón, ármate de valor y atrévete a vivir, entrégate. No pierdas tiempo con abstractos mentales, mientras más piensas menos funcionas. Sete útil a ti mismo y a los demás haciendo lo que amas, dedícate a lo que eres bueno haciendo. Comparte tu talento con el mundo y así brotarán de tus manos las respuestas a todas tus preguntas. Haz.

El mundo está caótico, ¿Cómo lo podemos arreglar?

Como es arriba es abajo, como es adentro es afuera. No seas tan duro contigo mismo, no te juzgues ni cuando haces bien, ni cuando haces mal. No te definas por tus defectos. La vida está llena tanto de maravillas vibrantes, belleza y encantos, como de frío, dolor y rigidez, no basta ver unicamente un lado sin reconocer el otro.

El tao dice si quieres arreglar algo no hagas nada.


Esa idea tonta de que el mundo está colapsando es infatil. Es la visión de un niño asustado dentro de un parque de atracciones, con miedo a perderse entre la multitud, o de que las maquinas cobren vida y empiecen a devorarse a las personas, es el reflejo de una crianza y una educación lineal.


El mundo no se está yendo a la perdición, está saliendo de ella. La humanidad y el planeta no se están enfermando, se están sanando, porque si hoy estoy enfermo es porque contraje la enfermedad ayer, es la ley de gestación.


Por lo tanto si estás enfermo no puedes enfermar solo puedes sanar. Y empiezas a sanar en el momento en que abandonas tu posición y dejas de identificarte con tus ideas preconcebidas de como debieran ser las cosas, es decir, cuando dejas de definirte y amplías tu punto de vista.

Cultiva sentimientos de alegría y dicha por medio de practicar aceptación propia y agradecimiento. Haz las paces con quien eres en vez de con las cosas que quieres. Desarrolla una visión del mundo saludable y verás que poco a poco tu agitación mental empieza a disminuir, y el caos a tu alrededor comienza a suavizarse, desvaneciendose con cada nuevo despertar.


(FIN DE LA ENTREVISTA)

No hay comentarios:

Publicar un comentario